Los propietarios adquirieron la casona encontrándose ésta en una situación de deterioro avanzado. La entrada de agua desde el exterior, tanto por la cubierta como por uno de los laterales era permanente. Respecto del contenido, el interior de la casa había sido totalmente vaciado permaneciendo tan solo del mobiliario original una librería gracias a que la misma se encontraba anclada a la pared.
Tanto en los trabajos de restauración del edificio como en su decoración se ha tratado de mantener la esencia de la casa tratando de recuperar su estado original. El mobiliario aportado es, en su mayor parte, material reutilizado que ha sido restaurado por los mismos propietarios.
Si bien el edificio se ha habilitado como hotel rural, con su entrada independiente, se ha reservado la parte baja del mismo para albergar el centro museístico.
Para la creación del mencionado centro museístico se ha partido de los elementos ya existentes en la bodega y se han incorporado diversos útiles, de diferente tipología y origen, con el fin de dotarlo de un conjunto de piezas suficientes acorde con la finalidad pretendida.
Por último, debemos mencionar que además hemos realizado una laboriosa investigación en torno a la figura de Federico de Santiago y Ruiz de Loizaga, nacido en esta casa en 1850 y que a día de hoy se encuentra envuelto en un absurdo anonimato a pesar de tratarse de un ilustre personaje muy influyente en su época.
El centro museístico “Casona Indiana de Ayuelas” pretende ser un ente vivo en continua evolución y nace con vocación de convertirse en un punto de encuentro cultural abierto a organizar, participar y difundir cuantas actividades estén relacionadas con dicho ámbito.